Decenas de miles de estudiantes se manifiestan contra el Plan BoloniaUn centenar de profesores e investigadores universitarios firman una declaración de apoyo
inSurGente.- Mientras miles de universitarios toman hoy las calles en una jornada de lucha contra la privatización de la enseñanza, un grupo de profesores han puesto, por fin, rubrica a un escrito en contra de la reforma universitaria que tan contento tiene a empresarios, y partidos como el PP y el PSOE.
Al grito de “Fuera las empresas de la universidad” y con el lema de “Ni Lou ni Bolonia. Por una universidad no mercantilizada”, miles de estudiantes universitarios, apoyados por estudiantes de secundaria y algunos profesores, se han manifestado por las calles de Madrid hasta el Ministerio de Educación. Las Asambleas contra Bolonia de Madrid habían convocado para hoy una jornada de huelga y una manifestación contra la implantación del polémico Plan Bolonia.
“Manos arriba, Bolonia es un atraco”, “no somos rentables, somos imprescindibles”, “no somos clientes, somos estudiantes”, “Bolonia no se implanta, la Uni se levanta”, “ni LOU ni Bolonia ni precariedad” o “Yo tenía una carrera que Bolonia me quitó” son algunos de los lemas coreados por los jóvenes.
Según un portavoz de la comisión de prensa de la Asamblea coordinadora de Madrid, las facultades de Filosofía, Psicología y Políticas y Sociología de la Universidad Complutense han sufrido “cierres completos” con el 92% de sus aulas cerradas por los estudiantes esta mañana.
Al mismo tiempo, los estudiantes debaten la posibilidad de empezar encierros permanentes en las facultades, especialmente la Asamblea de estudiantes de la facultad de Políticas y la de Filosofía.
El portavoz ha explicado que los intentos de los estudiantes de hablar con la ministra de Educación, Mercedes Garmendia, y con el Secretario de Estado de Universidades, han sido infructuosos. A través de su secretaria, la ministra “nos dijo que no hablaría con nosotros”.
Según este portavoz de las asambleas madrileñas, los universitarios cuentan con el apoyo y la participación en la manifestación de los estudiantes de secundaria, con los que se están en contacto a través de la recién creada Coordinadora de Institutos antiBolonia, presentes en la manifestación con su propia pancarta. Los estudiantes universitarios coordinarán sus próximas acciones y su “estrategia política y mediática” en el próximo encuentro estatal de Asambleas antibolonia que tendrá lugar en Burgos entre el 20 y el 22 de marzo.
Declaración de profesores e investigadores universitarios sobre la huelga convocada para el día 12 de marzo por el movimiento estudiantil contrario a la actual reforma universitaria (Plan Bolonia)
Quienes firmamos este escrito, todos profesores e investigadores universitarios, declaramos, en primer lugar, que nos ha decidido a redactarlo y a hacerlo público el espectáculo bochornoso de la respuesta institucional a los estudiantes contrarios a los principios y al modo de implantación de la actual reforma universitaria. No es difícil pronosticar en qué quedará el desigual pulso entre, por un lado, universitarios que piden el aplazamiento de la puesta en marcha de dicha reforma hasta que una verdadera discusión pública haya esclarecido su sentido general y su contenido preciso y, por otro, el poderoso complejo gubernativo-gerencial-mediático responsable de la reforma misma y del diseño y ejecución de la actual campaña de “información” sobre el denominado plan Bolonia.
Pero la sociedad española debe saber que, lejos de tratarse de energúmenos antisistema o desinformados adolescentes, los estudiantes del llamado “movimiento anti-Bolonia” son, en este momento, los únicos miembros de la comunidad universitaria que están teniendo la lucidez, la responsabilidad, el coraje y la generosidad suficientes para defender inflexiblemente, contra su sustitución por una cosa bien distinta, el concepto mismo y las condiciones de existencia de un verdadero sistema de enseñanza superior. Los únicos interesados, al parecer, en la supervivencia y ratificación de una institución que conserve de “Universidad” algo más que el nombre y que permanezca ligada a los ideales de la Ilustración por algo distinto de la propaganda. Lo hacen en un país y en un mundo que se muestra incapaz de entender y respetar una actividad como el estudio, en un país y en un mundo que desprecia la idea misma de una búsqueda desinteresada de la verdad, que ignora, en general, todo lo que una larga tradición llamó teoría, y que apela al “interés de la sociedad” para socavar las bases humanistas y los logros institucionales del concepto político de igualdad.
La sociedad española debe saber que somos muchos los profesores e investigadores que, quizá no tan generosos, quizá no tan valientes, y desde luego mucho menos eficaces que estos estudiantes, suscribimos plenamente sus planteamientos. Es más que probable que sean derrotados en su esfuerzo por conservar el tesoro de independencia científica y de libertad académica que todavía connota la palabra “Universidad”, que el estruendo y los publi-reportajes diseñados para desactivarla distorsionen lo más hondo de la exigencia de estos muchachos: la exigencia de que no desaparezca de su país el lugar y la promesa de una posibilidad de vida seria, regida por el amor al saber y a la realidad. Esa promesa nos encaminó a la Universidad cuando éramos estudiantes: reconocíamos en ella el lugar que guardaba la libertad para la verdad como su esencia más propia, el fin del colegio y los tutores, la oportunidad también para nosotros de convivir, como adultos, con hombres sabios que no tenían otro interés que la investigación de las cosas del mundo, por ellas mismas, por amor del conocimiento.
Por eso, si los estudiantes son derrotados en su defensa de la Universidad pública quisiéramos que se nos considerara derrotados con ellos. Y por esta misma razón, nos sumamos a la llamada que hacen a la comunidad universitaria, y pedimos apoyo a la huelga y manifestación del 12 de marzo en defensa de la Universidad pública.